Entre silencios y esperas

Entre silencios y esperas la noche se viste de luna
alumbrando sombras de ilusiones que se desvanecen
la implicación se desdibuja según la respuesta no dada.
La percepción es diversa y plural, como las formas.
Encuentros fugaces que vienen, van y desaparecen.
Solo una palabra certera y precisa motivará el encuentro.
El estímulo pretende el rumor o susurro de lo que desea oír.
La intuición anda perdida, porqué el deseo quizá nunca existió
fue un espejismo puro reflejo de lo que quiso ver, vivir o soñar
un acto placentero de supervivencia visionaria,

para sentir un asomo de vida.
Somos seres errantes entre búsquedas y encuentros fugaces,
la mirada percibe el horizonte inalcanzable, cuando más claro
más lejano y la fuerza cede su poder al destino trazado.