Sembraré el fruto y la flor de la pasión en tu huerto del vacío
buscaré entre las flores todos los colores que dibujen tu silueta
tomaré fresas silvestres y pintaré tu sonrisa triste, con un tierno beso.
Acariciaré tu piel sedosa, tu fino pelo y desvelaré el deseo adormecido.
Descubriré entre todas las cepas el más delicioso de los vinos
para que alegren la velada de un corazón entristecido...
Acunaré tu sueño, velaré tu pena y te susurraré al oído
cosas bellas, una canción alegre y decirte que tu presencia
y compañía me complacen día a día.
No hay comentarios:
Publicar un comentario