Camino en silencio con la mirada perdida
ensimismada en pensamientos que divagan
siento tristeza por lo que no fue y podía haber sido
el tiempo pasa y su huella hoy huele a vacío.
El frío invierno me recuerda ausencias sin retorno.
Una ráfaga de viento me envuelve de sueños irrealizados
de besos olvidados y de abrazos reprimidos, empieza a llover.
la noche llora a través de la lluvia, desconsoladamente
Un hombre sin hogar se refugia en la embriaguez de un vino de cartón,
reta al destino con gritos inteligibles de contrariedad,
expresada con un monólogo de lamentos
transeúntes disfrazados de rutina inexpresiva
ignoran su presencia molesta
y siguen su camino hacia sus hogares confortables,
hoy hay una buena película en la TV, sin publicidad.
Si hay suerte y no presenta violencia ni desatinos,
quizás invite a soñar evadiéndose de la realidad vivida
y al despertar empiece un nuevo día
con expectativas de renacimiento y cambio.
.
3 comentarios:
muy triste pero muy real
el gran mal que preside esta Era es cerrar los ojos y abrir la boca... Pepa, cariño, reitero-te que tú tienes los ojos muy grandes y muy abiertos.
la realidad igual que las emociones, divagan entre lo bueno y lo malo, la rutina y lo nuevo, la tristeza, alegría, la complacencia y alguna que otra fustración. La mirada intenta captar lo que abarca y ante la sencillez de una sonrisa, o una palabra puede resplandecer de complacidad y de gratitud. La que siento con vuestras palabras. Gracias.
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