Y de pronto vio una luz con un tono tan verde como la esperanza. Por la mañana pudo ser atentida a pesar que tenía hora al cabo de un año por una traumatóloga tan profesional como humana. ¡Mujer tenía que ser!... Entró a la consulta y le dijo:" No vengo porqué sí, ni por influencias, vengo por desesperación por un dolor insoportable que me quita fuerzas, calidad de vida y porque ya no puedo más"...la doctora, la escuchó le dijo exactamente que le explicara donde, miro la resonancia y la radiografías y le dijo que no se podía vivir con dolor...y la citó tan pronto como pudo para hacerle una artroscopia, el menisco estaba multifisurado con derrame articular y con lesión del cartílago. Había que intervenir lo antes posible. Salió con la hora y el día y con una felicidad por ser comprendida finalmente y con la esperanza de una recuperación, cosa que últimamente dudaba. Los dos traumatólogos anteriores la habían sentenciado diciendo que no había solución por desgaste y artrosis. La doctorara afirmó que la afectación del cartílago era normal de su edad y no preocupante. Hoy sí que había sido un gran día, a pesar de ser lunes, el mejor regalo de su cumpleaños se había adelantado cuatro días, y daba gracias al universo y sobretodo a esta profesional con una mirada humana de saber sanar y empatizar como debería tratarse siempre la salud hospitalaria y ambulatoria para todo el mundo, sin distinciones.
lunes, 14 de abril de 2014
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario